Cita



El momento de la verdad nunca llega, el momento de la verdad nunca se va.
Ramón Eder

lunes, 26 de enero de 2015

Bronquiolitis



Hemos terminado de comer cuando emiten ese vídeo en el telediario. Héctor está en el salón viendo unos dibujos animados, Sonia se ha quedado en Écija porque tiene claustro por la tarde y yo estoy de pie en la cocina, meciendo el cochecito, intentando dormir a Pedro, a quien la pediatra ha diagnosticado bronquiolitis esta misma mañana. Veo la noticia y pienso en toda esa gente (especialmente personas mayores) para la que el telediario todavía es sinónimo de realidad. ¿Cuántas personas se habrán alarmado innecesariamente al escuchar que su hijo, nieto o sobrino tiene "una enfermedad poco conocida pero que puede llegar a ser mortal"?

¿Una enfermedad poco conocida? Será para quien no tenga contacto con recién nacidos. Nosotros ya llevamos seis. Cuatro tuvo Héctor y Pedro va por su segunda. Muchos hijos de conocidos nuestros han padecido bronquiolitis. El propio reportaje reconoce que "la bronquiolitis es la principal causa de hospitalización de los niños menores de 14 años en España".

¿Para qué sirve una televisión pública que se dedica a alarmar a la población en lugar de informar con un mínimo de rigor? Ya no se trata sólo de asuntos políticos donde damos por sentado el partidismo, ni de sucesos morbosos donde prima el espectáculo, sino de simples noticias de interés general en las que bastaría con un mínimo de rigor profesional para cumplir con la función de servicio público. La noticia se titula "lanzan una campaña para prevenir la bronquiolitis" pero sólo menciona de pasada cuatro medidas de prevención, algunas de las cuales son de imposible aplicación para muchas familias (¿lactancia materna cuando hace semanas o meses que destetaste al bebé?, ¿sacamos al niño de la guardería cuando no tenemos con quien dejarlo?). El grueso del reportaje se dedica a enumerar, imagen de bebé intubado incluida, las consecuencias más dramáticas de la enfermedad, que no las más frecuentes.

Cuando diagnosticaron a Héctor su primera bronquiolitis nos asustamos un poco. Afortunadamente la pediatra de los niños es una persona muy sensata y nada alarmista que nos tranquilizó con sus explicaciones. También ayudó que para entonces ya había leído sobre la enfermedad en el blog de Amalia Arce, Diario de una mamá pediatra. En él pude encontrar la información que hoy ha escamoteado la reportera del telediario.



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