Cita



El momento de la verdad nunca llega, el momento de la verdad nunca se va.
Ramón Eder

martes, 29 de mayo de 2012

La mala educación

Creo recordar que fue Charles Dickens quien escribió en Una historia en dos ciudades aquello de "Le tocó vivir tiempos difíciles... como a todos los hombres". La frase me vino a la cabeza hace una semana, en la charla que les dieron a los alumnos de 2º de Bachillerato para informarles sobre los ciclos formativos de grado superior. No hay duda, a estos chavales les va a tocar vivir unos tiempos difíciles. El futuro se anuncia negro.


Perspectivas de la evolución del PIB español

Hablemos de los alumnos de 2º de Bachillerato nocturno. Teníamos puesto el examen de la tercera evaluación el pasado 22 de mayo. Cuando se convocó la huelga en el sector educativo para ese día les sugerí la conveniencia de cambiar la fecha del examen (sólo se podía adelantar, puesto que el 22 era el último día lectivo con clase de Matemáticas). Se negaron en rotundo porque, según ellos, la semana previa la tenían completa de exámenes y no podían dedicar tiempo a estudiar Matemáticas. Yo no pensaba secundar la huelga así que la fecha bien se hubiera podido mantener, pero no quería correr el riesgo de que ocurriese algún inconveniente y el examen no pudiera celebrarse con normalidad, sabiendo que no había ninguna posibilidad de volver a realizarlo más adelante.

Llegamos al acuerdo de poner el examen el lunes 21 a las 16.30, fuera de mi horario de trabajo. Así se hizo. Cuando entregaron el examen los alumnos me preguntaron que para cuándo tendría las notas. "Mañana", contesté, "venid a clase y podréis ver vuestros exámenes corregidos y resolvemos las dudas que tengáis sobre el examen de suficiencia" (El examen de suficiencia es mañana, martes 29).


Evolución del mercado laboral español
"Pero es que mañana no tenemos por qué venir. ¿No podrías mandarnos las notas por correo electrónico?" Me quedo tan asombrado con la propuesta que no consigo reaccionar. Cuando salgo de mi estupor ya se han marchado. Parece mentira que después de casi nueve meses de decepciones, todavía sean capaces de decepcionarme una vez más. Debo ser un iluso sin remedio.

No les informé de la nota por correo. De hecho estuve a punto de no mandar correo alguno. Pensé en pinchar la información en el tablón de anuncios. La enseñanza de adultos es presencial y el que quiera informarse que mueva el culo y se acerque al centro. Finalmente les mandé un correo con la lista de los alumnos que se tienen que presentar a suficiencia (todos menos dos). No quiero que luego digan que no estaban enterados (aunque sea su responsabilidad asistir a clase para enterarse).


Parados con una o más carreras universitarias
Hablemos de M, un alumno que podría aprobar el curso muy tranquilamente. El año pasado le quedaron Lengua y un trimestre de Matemáticas para septiembre. Los recuperó sin problemas. Siempre va al mínimo esfuerzo. A trancas y barrancas, apurando todas las recuperaciones llega a la última evaluación sin materia pendiente. Entonces vuelve a relajarse. El día 11 de mayo tuvimos el examen final de la 3ª evaluación. Lo entrega en blanco. El día 18 de mayo, sólo siete días más tarde y después de estar toda la semana pagando clases particulares (según confesión propia), se queda a medio punto de aprobar. Hoy, 28 de mayo, tenía la última oportunidad antes de septiembre de aprobar la materia. Sólo tenía que estudiar la 3ª evaluación. No se ha presentado al examen ni nadie de su familia se ha puesto en contacto para notificar su ausencia.


Habría que añadir el porcentaje de ninis que están matriculados en alguna enseñanza oficial

Hace más de un mes Jefatura de Estudios me entregó un borrador con el calendario de exámenes finales de 2º Bachillerato. En ese borrador estaba previsto que hoy se celebrasen los exámenes de Inglés y Matemáticas. Los alumnos de mi tutoría, al ser informados, me pidieron que por favor no coincidieran estas dos asignaturas el mismo día. Trasladé su sugerencia a Jefatura y se tomó en cuenta. El calendario oficial se publicó el día 4 de mayo. Informé en clase y se pinchó un cuadrante en el tablón que hay en el aula junto a la pizarra (si bien es cierto que el cuadrante desapareció al poco, pero hay más cuadrantes en diversos tablones por los pasillos). Esta mañana cuatro alumnos se han presentado al examen de Inglés, que está previsto para mañana. El examen de Geografía, que es lo que tocaba en ese momento, lo han entregado en blanco porque pensaban que lo tenían mañana (¿y cuándo tenían pensado empezar a estudiar Geografía, digo yo?).

Ni estudian Ni trabajan
P y L, dos alumnas de mi tutoría. Vienen a buscarme esta mañana al departamento porque quieren hablar conmigo. El examen de Matemáticas es dentro de una hora:
- Profe, queríamos preguntarte una duda que tenemos.
- ¿Cuál?
- Es que pensamos que no hemos estudiado lo suficiente. ¿Qué hacemos? ¿Nos presentamos al examen?
- No entiendo bien la pregunta. Esto no es como la Universidad, aquí no corre convocatoria. No perdéis nada por presentaros.
- Pero es que no sabemos si vamos a saber hacerlo y para dejarlo en blanco...
- La mejor forma de comprobar si sabéis hacerlo es intentar hacerlo.
- Sí pero es que...
- La decisión de presentarse o no al examen es vuestra. Es una decisión personal. Yo no conozco vuestras circunstancias ni sé cuánto tiempo habéis dedicado al estudio, ni lo mal que os puede hacer sentir un examen para el que pensáis que no estáis preparadas. Yo os aconsejo que os presentéis. A partir de ahí es vuestra decisión y vuestra responsabilidad.
Una hora después ninguna de las dos se encontraba en el salón de actos.


Graduados en segunda etapa de educación secundaria
Estamos hablando de alumnos que tienen 18 años en el mejor de los casos y 21 en el peor ("adultos"). Alumnos que son la élite del centro. Son los que han conseguido llegar al último curso del Bachillerato. No estamos hablando del altísimo porcentaje de alumnos que abandonan sin el título de la ESO ni de los que deciden finalizar sus estudios con ese título. No deja de sorprenderme la nula responsabilidad que quieren aceptar incluso sobre su propia vida. ¡Vienen a buscarme para que les "de permiso" a no hacer el examen! Están deseando que alguien tome la responsabilidad de decidir por ellos.


Panorama de la educación 2011

Las estadísticas que estoy insertando me las ha facilitado el compañero de ciclos que dio la charla mencionada a los alumnos de 2º de Bachillerato. Están sacadas de la presentación con la que fue ilustrando sus explicaciones.


Nivel de formación de la población adulta
Es verdad que son tiempos difíciles, que el panorama es desolador. Es cierto que los chavales son víctimas de la pésima educación que les hemos dado. No me refiero sólo a la falta de conocimientos curriculares (que también), sino a la falta de autonomía, al poco dominio del lenguaje (no hablemos de idiomas extranjeros), a la falta de disciplina y esfuerzo para conseguir sus objetivos, a su absoluta falta de asunción de responsabilidades.

Pero también es cierto que estos chavales han tenido (y tienen) más oportunidades y más recursos a su disposición que ninguna generación anterior de españoles. Y también es cierto que llega un momento, una edad, en el que uno es responsable, aunque sólo sea en parte, de lo que le sucede. Estos chicos, la mayoría de los que conozco, tienen en sus manos la posibilidad de un futuro mejor. Y deciden desperdiciar esa oportunidad. Lo deciden ellos solos, sin que ningún recorte educativo se lo imponga.


miércoles, 23 de mayo de 2012

Noticias encadenadas


Ayer los medios locales traían en primera plana una fotografía como esa. Córdoba bate el récord de sevillanas, titulaba El Día de Córdoba. El periodista R. de la Haba se mostraba un poco más excéptico en su crónica del Diario Córdoba: Nadie vio a ningún jurado del Guiness, aunque la organización juraba que haberlo lo había. Nadie lo subió tampoco al escenario de la Caseta Municipal, que hubiera sido lo suyo para evitar suspicacias. Pero el speaker , tras preguntar al notario Rafael Díaz-Vieito --buscado y llevado de urgencia porque, dijeron, falló el titular y que, por esa misma circunstancia, llegó casi una hora después de que se hubieran atacado las sevillanas para batir la marca--, proclamó que Córdoba había conseguido el nuevo récord Guiness de parejas bailando sevillanas al mismo tiempo y en el mismo lugar. Pues vale. El Guiness dirá. De momento, lo que el señor notario certificó es que había habido "exactamente" 780 parejas bailando, aunque hay que insistir en que en teoría no las vio, sino que lo hizo en base a los boletines de suscripción. Pues vale. El Guiness dirá si el anterior récord, que ostentaba Sevilla con 652 parejas, se ha barrido. Mientras tanto, para dar fe de que fue así, además del notario, subieron al escenario Rafael Jaén y Amelia Caracuel, los delegados mano a mano de Festejos para esta Feria, y el agente 9041 de la Policía Local. "Llevo aquí desde las tres de la tarde y doy fe de que ha venido mucha gente", dijo, más o menos, en medio de un murmullo de sonrisas entre los presentes a un acto promovido por Pascual González y Los Cantores de Hispalis, y respaldado por el Ayuntamiento, que comenzó ilusionante y acabó, por todo lo dicho, con un sabor a chapuza innecesario. Y habrá que insistir en que a lo mejor solo fue la impresión, pero nadie la disipó. Nadie vio a nadie del Guiness. Y el Guiness dirá. Y no necesariamente en playback , como también sonaban, quizás solo sonaban, quizás solo fue una impresión, las sevillanas.

Después del fiasco de la capitalidad cultural y de que en la UNESCO no supieran apreciar los patios cordobeses en su justa medida, ahora sólo faltaba que los del récord Guiness no certificaran que somos los más marchosos de toda andalucía. ¡El mundo en nuestra contra!


Los periódicos de hoy recogen la noticia de la huelga de ayer. Así me entero de la iniciativa que algunos alumnos de la UCO (no se informa de cuántos) están llevando a cabo para protestar por los recortes. Mantuvieron un encierro la noche previa a la huelga en la Facultad de Educación. Ahora anuncian que piensan retomar el encierro el día 29 de mayo y en esta ocasión lo harán de manera indefinida. Y uno se pregunta, ¿por qué esperar al día 29? ¿a qué viene este anticlímax del espíritu reivindicativo? ¿acaso necesitan acaparar víveres dado el carácter indefinido del nuevo encierro? Entonces caigo en la cuenta de que la Feria termina el domingo 27 de mayo. Lunes de resaca y martes a encerrarnos en la Facultad. ¡Qué buen plan! Bastante sacrificio hicieron los encerrados no pudiendo participar el lunes por la noche en la conquista del récord Guiness de sevillanas. No se les puede exigir más.


Otra de las noticias del día ha sido el último disparate de la presidenta de Madrid. La bombero pirómano, encantada de haberse conocido y jactándose de decir las cosas tal como las piensa, sincera y honesta a la par que liberal. Lo que está claro es que esta señora no es ni inútil ni estúpida. Seguramente piense que los españoles podríamos estar preocupados por las consecuencias que nos puede traer la desviación en el déficit de la comunidad que preside, o por la reciente nacionalización de Bankia o incluso por los recortes educativos de los que ella es adalid y precursora. Todos asuntos espinosos, en los que la señora presidenta tiene una acusada responsabilidad, y que están comprometiendo nuestro presente y nuestro futuro. Pero no, por lo visto el verdadero problema que tenemos es que los aficionados del Barca y el Athletic puedan pitar el himno nacional en la final de la Copa del Rey. Hay que tomar medidas urgentes. ¡Que se suspenda el partido!

¿Qué mejor manera de desviar la atención? Si al final van a tener razón sus botafumeiros, esta mujer tienen una mente brillante. Fútbol y nacionalismo bien mezclados. ¿Hay mejor opio para el pueblo?


Pues sí. Fútbol y Feria bien mezclados. FF. Hoy resaltan los periódicos locales la victoria del Córdoba frenta al Cartagena, dejándo al equipo, a falta de dos jornadas por disputarse, en situación muy ventajosa para acceder a los playoffs de ascenso a Primera. El estadio de fútbol Nuevo Arcángel está situado en el recinto ferial, así que los aficionados pueden disfrutar de la Feria antes y después del encuentro. El próximo domingo día 27 el Córdoba juega en su estadio el penúltimo partido de liga. Es el último día de feria. Si el equipo gana es posible que se asegure matemáticamente la plaza en los playoffs. ¿Se puede pedir más, celebrar una victoria histórica de tu equipo en la Feria? No, no se puede. La resaca también será histórica. Menos mal que los estudiantes de la UCO lo tienen todo bien pensado y hasta el martes 29 no reanudan las reivindicaciones. Los recortes son los recortes pero lo importante es lo importante.

_


martes, 22 de mayo de 2012

Otra huelga

En apenas dos años he sido convocado a cuatro huelgas.

La primera de ellas fue el ocho de junio de 2010. Estábamos convocados los funcionarios de todas las administraciones para protestar por los recortes de Zapatero, particularmente por la famosa bajada de sueldo. Fui de los pocos que secundó la huelga. He de decir que me sorprendió el escaso seguimiento. Tanta protesta en la cafetería, tanto rajar de ZP y a la hora de hacer pública y notoria la protesta todo el mundo fue a su trabajo como si tal cosa. Moraleja: se puede bajar los sueldos de los funcionarios y no pasa nada. Es más, el gobierno de Griñán acaba de tomar exactamente la misma decisión sabiendo que le va a salir gratis, políticamente hablando.

El resultado es que después de la huelga ni se nos restituyó el sueldo (es más, como digo, nos lo han vuelto a bajar sin que ningún sindicato alce la voz) ni se continuaron las movilizaciones para conseguir este objetivo. Y esto es lo que no consigo entender. ¿Para qué se convoca una huelga? ¿Sólo para manifestar digusto hacia las medidas del gobierno? Vamos, por favor, hay muchas otras formas de manifestar digusto (véase 15M, por ejemplo). No es necesario perder un día de trabajo (y de sueldo).

Las dos siguientes, el 29 de septiembre de 2010 y el 29 de marzo de 2012 fueron huelgas generales. No secundé ninguna. Ni siquiera me lo planteé. Me había dejado muy mal sabor de boca la primera experiencia.

Hace dos o tres semanas los sindicatos convocaron para hoy una huelga en todo el sector de la enseñanza pública, desde infantil hasta la universidad. El motivo es protestar contra los recientes recortes educativos. En defensa de la enseñanza pública. Yo también estoy por la defensa de la enseñanza pública pero creo que para convocar una huelga es necesario que se den una serie de factores que ahora no se están dando.

Como ya escribí aquí, pienso que una huelga es un recurso de presión que tienen los trabajadores para mejorar sus condiciones laborales. Es un recurso que supone un coste importante a todos los afectados. Supone un coste para los clientes o beneficiarios del servicio que dejan de recibirlo, supone un coste para los empresarios que pierden oportunidades de negocio o cancelaciones de contratos, supone un coste político para la Administración que está obligada a ofrecer unos servicios públicos de calidad, supone un coste para los trabajadores que dejan de recibir su salario durante el tiempo que dure la huelga, y también supone un coste para el conjunto de la sociedad que sufraga mediante los impuestos unos servicios e infraestrucuturas que no se utilizan o se infrautilizan durante la huelga.

En resumen, una huelga nunca es deseable y precisamente por estas razones es siempre el último recurso en una negociación o en una reivindicación. Antes de llegar a la huelga (y en todo caso al mismo tiempo que se hace huelga) se deben llevar a cabo una serie de acciones tales como elevar propuestas, entablar negociaciones, convocar reuniones informativas, redactar manifiestos, convocar y asistir a manifestaciones, implicar en lo posible al conjunto de la sociedad en la resolución del conflicto, organizar campañas de protesta, etc, etc. El abanico de posibilidades es amplio.

Como todo último recurso no deseado, una huelga sólo debe ser convocada cuando hay consenso entre los trabajadores sobre su utilidad y cuando estén dispuestos a realizar los esfuerzos necesarios (incluidos los económicos) para conseguir el objetivo. Una huega, aislada, para protestar, no sirve de nada. Si de verdad se pretenden conseguir los objetivos es necesario quemar las naves. No hay vuelta atrás. Se convoca una huelga de una semana, y si al cabo de la semana el gobierno no se sienta a negociar se amplía la huelga a la semana siguiente. Así se presiona para conseguir los objetivos, que es para lo que debería servir una huelga. Para protestar, ya digo, hay otros métodos menos costosos e igual o más efectivos.

Tampoco estoy conforme con los motivos que sustentan la huelga de hoy. Me explico. Como escribí en este mismo blog hace tiempo: la mayoría de la sociedad asiste inpertérrita a los recortes sociales como si fueran simples conflictos laborales. No debería ser solo el personal sanitario de Cataluña el que proteste, deberían protestar todos los enfermos potenciales, es decir, TODA LA SOCIEDAD. Y lo mismo con la enseñanza en Madrid y Castilla La Mancha. No debería ser un pulso entre profesores y gobiernos autonómicos, debería ser un pulso entre toda la sociedad y esos mismos gobiernos. Entonces SEGURO que se podrían encontrar medidas alternativas para reducir el déficit.

No somos los profesores los que debemos protestar contra los recortes educativos. Es la sociedad en su conjunto la que debe hacerlo. Los profesores lo que debemos hacer es informar de la manera más rigurosa posible a la sociedad de cómo van a afectar los recortes a la calidad de la enseñanza. Los profesores podemos, por el conocimiento que tenemos de la materia y por la cuenta que nos trae, liderar las protestas pero nunca monopolizarlas. Porque, además, corremos el riesgo de caer en la insidiosa trampa dialéctica que proponen la presidenta de Madrid o el ministro de Educación. Míralos cómo protestan, y todo porque tienen que trabajar dos horas más. ¡Con las vacaciones que tienen y encima se quejan!

Los que llevamos tiempo trabajando en esto sabemos que cuando hay un problema en un instituto que requiere una inversión importante o la intervención de la autoridad educativa (por ejemplo, no funciona la calefacción, o una mala práctica profesional ostensible y reincidente) sólo se soluciona cuando los padres actúan. Una manifestación de padres de alumnos en la puerta de la delegación. ¡Eso es lo que temen los políticos no una huelga (encima fallida) de profesores!

Si de verdad queremos evitar los recortes educativos debemos demostrar y explicar a la sociedad (a los alumnos, a los padres de los alumnos) por qué los recortes son tan perjudiciales. Y convencerlos para protestar todos juntos. Argumentar y desmontar las mentiras del gobierno. Igual que cuando no funciona la calefacción. Si no convencemos previamente a la sociedad toda protesta será inútil e incluso contraproducente para el colectivo de profesores. Puede dar la impresión de que camuflamos reivindicaciones laborales en el manto del interés general.

Ante el baile de cifras habitual un dato fidedigno. En mi instituto hemos acudido a trabajar 49 de los 85 profesores que integramos el claustro.

_

viernes, 18 de mayo de 2012

Morir de éxito


Este pasado domingo finalizó el concurso anual de patios, que desde siempre ha sido la excusa perfecta para disfrutar de la ciudad. En los últimos años el Ayuntamiento ha hecho un esfuerzo para promocionar el concurso de cara al turismo: suplementos en los periódicos, noticias en los telediarios (hubo un año en el que Matías Prats presentó el telediaro de Antena 3 desde un patio del palacio de Viana) y un sinfín de iniciativas con el objetivo de atraer visitantes. Dentro de esta campaña, el año pasado se presentó la candidatura de los patios para que fueran proclamados por la UNESCO patrimonio inmaterial de la humanidad y formar parte de ese selecto grupo de hitos culturales (267 en este momento) junto al flamenco, el tango, el fado, los castells, la dieta mediterránea, el misterio de Elche, la caligrafía china y la ópera tibetana, por mencionar unos pocos ejemplos; pero en el que no están incluidos ni el jazz ni la música pop, ni el cine, ni los Juegos Olímpicos, ni la declaración de los derechos humanos, ni ninguna manifestación cultural proveniente de Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, Irlanda, Chile, Alemania, Polonia, Suiza, Finlandia, Suecia, Noruega, Australia y la mayoría de países africanos, por citar algunas de las regiones que por lo visto son yermas en cuanto a patrimonio inmaterial de la humanidad.

Tengo mucho cariño al concurso de patios. Me trae recuerdos entrañables. De la infancia, cuando mis padres nos llevaban a mi hermana y a mí a visitarlos. ("mamá, ¿en este patio hay pozo?"). De mi primera juventud, cuando no vivía en Córdoba y al regresar por estas fechas me sorprendía lo bonita que era. Es una ciudad única. Sonia siempre recuerda que la primera vez que visitó Córdoba fue con motivo del concurso de patios. Eso fue hace siete años. ¿Quién le hubiera dicho entonces que se instalaría en la ciudad y que tendría un hijo cordobés?

Cada año son más los turistas que acuden a la ciudad en el mes de mayo. Tanta promoción ha dado resultado. Al principio no era difícil esquivar a la masa de visitantes. Bastaba con evitar el barrio de San Basilio, el más cercano a la judería y a la Mezquita, durante el fin de semana. Posteriormente la prevención se hizo extensible a toda la semana; San Basilio estaba siempre abarrotado pero no me importaba. Mis patios preferidos son los situados en el entorno de Santa Marina y San Agustín, desde la plaza Colón a las Costanillas en un paseo placentero y ligeramente nostálgico.

Este año, al iniciar el recorrido habitual, me llevé la agradable sorpresa de que la "Casa de paso" participaba por vez primera en el concurso, aunque sólo la parte que daba a la calle Chaparro. Hacía años, lustros, tal vez incluso dos décadas que no entraba en un espacio que había sido mágico en mi infancia. Cuando era chico no perdía ocasión de atravesar la Casa Paso (así la llamábamos, omitiendo la preposición). Desde la Lagunilla a la calle Chaparro cada vez que iba a Almacenes Blanco y desde la calle Chaparro a la plaza de la Lagunilla de vuelta a casa. Me gustaba imaginar que si alguna vez me perseguía un bandido yo sólo tenía que dirigirme a la Casa Paso para darle el esquinazo. Mi perseguidor se quedaría en la puerta esperando a que volviera a salir, creyéndome acorralado en un callejón sin salida. El pobre no sospecharía que había una salida "oculta" por la que el héroe (es decir, yo) se alejaba tranquilamente hacia su casa. Estoy hablando de un tiempo en el que era habitual que niños de ocho años anduvieran solos por las calles. Ahora vivimos en otro mundo.

Me emocioné al entrar en la Casa Paso. Me hubiera gustado contarle a Sonia algunos de los recuerdos que se agolpaban en mi mente, que me hiciera una foto con Héctor, pero no fue posible. ¡Había tanta gente! Y todos con nuestra cámara de fotos en ristre. Una marea de turistas nos fue acompañando por el camino. No había forma de esquivarlos. Lo intenté, a la desesperada, en los patios más recónditos. Nada, ahí estaban, con uno de tantos planos en los que señalan las rutas para no perderse ningún patio, un ejército reemplazando a otro, no dejando espacio sin ocupar. No me lo podía creer. Era un miércoles laborable, a las seis y media de la tarde, con más de 35 ºC, ¿de dónde había salido toda esa masa de gente?


El año pasado la UNESCO desestimó la candidatura de los patios a ser nombrados patrimonio inmaterial de la humanidad. Este hecho, sumado a la gran decepción de perder la capitalidad europea 2016 a manos de San Sebastián, fue tomado como una humillación por parte de muchos conciudadanos. Se creó un sentimiento de agravio ("Córdoba no recibe lo que se merece") alentado por las instituciones y los medios de comunicación locales. La reacción al presunto agravio ha sido una hinchazón de patioterismo. Se van a enterar esos señores de la UNESCO de lo que vale un patio.

Por primera vez los vecinos de algunos patios han editado un pequeño folleto para que los visitantes se lo lleven de recuerdo. Algunos patios incluso tienen blog propio. El díptico de la casa paso dedica un 40 % de su espacio a publicidad. El resto se distribuye entre dos fotografías y una caja con un texto explicando la historia de la casa en español y su correspondiente traducción en inglés.

También los periódicos locales han competido por editar el suplemento gratuito más completo, indicando rutas, anécdotas, novedades, contextualizando la importancia histórica de este patrimonio inmaterial al mimo tiempo que daban consejos sobre dónde parar a tomar un refrigerio. El diario ABC, en su edición local, ha llegado incluso más lejos: ha organizado un concurso de patios paralelo al oficial y un concurso de fotografías sobre el mismo tema. El resultado ha sido todo un éxito:


Es la primera vez que he visto grupos organizados con guía incorporado que va detallando las características de cada patio. Aunque es más habitual encontrarse con grupos sin guía andando por las calles en busca de patios. Me recuerdan aquel aforismo de Wagensberg: "He visto un compacto de turistas recorriendo un museo sin que el grupo perdiera del todo la forma del autocar que les ha llevado hasta allí". La diferencia es que los museos están diseñados para albergar grupos de turistas y los patios están diseñados para el solaz y disfrute de a lo sumo dos o tres familias. Más pronto que tarde la estructura del grupo turístico salta por los aires atascada en el primer patio que encuentran y en el que, aunque actúan como si no se dieran cuenta, no caben todos a la vez. Entre bromas, chistes en voz alta y empujones la mitad del grupo, que está dentro, pugna por salir mientras que la otra mitad pugna por entrar. Y así de patio en patio. Y a más de 35 ºC.

¿Quién puede disfrutar de un patio en esas circunstancias? ¿cómo apreciar el sonido de la fuente entre tantas voces? El descenso térmico que provoca el microclima del patio, y que es una de esas cualidades inmateriales dignas de mención, es combatido con éxito por la masa sofocante de cuerpos sudorosos.

Dice el periódico que los patios han recibido un millón doscientas mil visistas durante los doce días que dura el concurso. Aun admitiendo que la cifra pueda estar sobredimensionada no deja de ser una barbaridad. Pero me sorprende que nadie dé la voz de alarma. Salvo contadas excepciones todo el mundo parece estar encantado con el éxito obtenido. Sí hombre, ha costado lo suyo, pero por fin en el mundo exterior empiezan a apreciar lo que valen los patios. A ver si el año que viene llegamos a los dos millones de turistas.

Me temo que el concurso de patios ya nunca será lo que fue. Quién sabe, tal vez la situación actual sea preferible. No está la economía cordobesa para desperdiciar fuentes de ingresos. Yo me veo como un abuelo cebolleta prematuro recordando los buenos viejos tiempos en los que se podía pasear tranquilamente por la ciudad y disfrutarla en todo su esplendor sin agobios, a tu aire, sin rutas preestablecidas ni riadas de personas por las estrechas callejuelas del centro.

En estos días se celebra en París el Festival Internacional de la Diversidad Cultural por el Dialogo y el Desarrollo de la UNESCO 2012. Córdoba es la ciudad española invitada y su correspondiente estand tiene forma de patio. Dice el alcalde que este año es casi seguro que la UNESCO incluirá a los patios en la lista del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad y que esto supondrá un aumento de turistas estimado en un 40 %. Resultará paradójico que la UNESCO reconozca las cualidades inmateriales de los patios cordobeses favoreciendo de ese modo su sacrificio en el altar de la ocupación hostelera.

_

viernes, 4 de mayo de 2012

Madera de político

El otro día, haciendo zapping, nos quedamos enganchados viendo un documental que emitían en la 2 sobre la masacre acontecida el pasado verano en la isla de Utoya, Noruega.


Los hechos son conocidos. Un individuo, que está siendo juzgado en estos días, puso una bomba de gran potencia en los edificios ministeriales del centro de Oslo. Después se dirigió a la isla de Utoya, donde se celebraba el campamento anual de la AUF, la sección juvenil del partido socialdemócrata que actualmente gobierna el país. Una vez allí, suficientemene armado y vestido de policía, se dedicó a ejecutar a todo aquel que se le pusiera a tiro. Según el documental, la policía de verdad tardó 72 minutos en llegar a la isla y detener al asesino. Para entonces ya se podían contar 69 víctimas mortales (ocho más en Oslo).

El documental se titula "la isla del terror" y se centra casi exclusivamente en las experiencias de los jóvenes que formaban parte del campamento. Para ello cuenta con los testimonios de algunos supervivientes y con la filmación de los días previos al atentado. No estamos hablando de un campamento cualquiera de los cientos de miles que se celebran en verano. Es el campamento anual de la AUF, cantera de los futuros gobernantes de Noruega, o al menos aspirantes a ello. Por el campamento pasan "celebridades" tales como el Ministro de Asuntos Exteriores y otros grandes líderes del partido. Todo es grabado por un cámara profesional. Durante los primeros minutos uno está viendo un documental sobre el campamento de la AUF en el verano de 2011 sin que nadie pudiera imaginar que realmente ese campamento iba a pasar a la historia.

Es a partir del atentado en Oslo y de la llegada a la isla del asesino, cuando el documental cambia de registro. Se acaban prácticamente las imágenes (afortunadamente no hay ninguna "reconstrucción") y el peso narrativo recae en el relato de los supervivientes.


Johannes Dalen (20 años)

Fue quien recibió la llamada avisando de que un "policía" quería acceder a la isla, se supone que para protegerla. Todos están en estado de shock por las noticias que llegan de Oslo.

"Hablamos con varios Secretarios de Estado mientras estábamos a bordo del barco" 31m




Woria Kamil (17 años). Su amigo Ismael fue ejecutado justo a su lado. No entiende por qué él no.
"Tengo muchas imágenes extrañas en mi cabeza" 39.50 "No entiendo por qué no me disparó en la cabeza. No lo entendí y esa es mi gran pregunta".


Emma Martinovic (18 años). Dirigente de la AUF
"la gente más maravillosa de la tierra reunida en un lugar" 4.17
"Antes de hacer nada, pareció que se aseguraba de que yo estaba mirando" 38.13
"Se reía, tenía... no se reía histericamente pero podías sentir su maldad. Sabías que tomaba aliento y se reía con todas sus ganas. Y los hombros le temblaban." 39.44
"Me entró el pánico. Sentí: ahora me toca a mí ser presa del pánico. Mis pulmones se estaban llenando de agua. Estaba lista para cerrar los ojos, echar la cabeza hacia atrás y claudicar. De pronto, veo a un niño. Me vuelvo hacia el niño y le digo; oye, eres un fantástico nadador. Él me mira, mira al cielo y dice: papá está muerto. Miré a mi alrededor y no lo entendía. <<Eres un fantástico nadador. Estás nadando por papá y mucha gente te está esperando en la otra orilla>>. Entonces me dice: yo creía que la policía debía de ser buena. Aquellas palabras me produjeron... tuve que sumergirme para que no viera que estaba llorando. 45m
"Quiero que alguien golpee en algún lugar dentro de mí para poder derrumbarme por completo, para poder llorar histericamente. Ponerme de rodillas y sufrir un colapso, una crisis emocional total" 55m


Eskil Pedersen (27 años). Líder de la AUF
"donde haces contactos y amigos para toda la vida"
3.17 discurso de bienvenida
"Fue el día que el terror se apoderó de Noruega. El país perdería su inocencia si se trataba de una bomba." 22m
"La otra persona que había en la habitación me llamó y me dijo: vete corriendo al barco ya" 26.16
"Sentí como si una alfombra de muerte cubriese toda la isla (...) Pasé corriendo al lado de dos personas que estaban tendidas en el suelo. Estaban muertas. No tuve la menor duda de que estaban muertas. (...) Yo fui la última persona en subir al barco. No había nadie más allí. No volví a ver a nadie. No había nadie allí. Muy deprisa el barco empezó a alejarse. 27m
"Si no estuviste en la isla, no puedes entender las razones de las decisiones que tomamos cada uno. Tomamos una decisión que fue intentar sobrevivir." 55.09


Herman Heggertveit (18 años)
"Entonces desaparece todo pensamiento racional y actuas por puro instinto. Le habían disparado en las piernas, estaba herido, corría por pura inercia. Intentamos ayudarle mientras corríamos y corrimos durante un buen rato" 37.04
"Se presenta a sí mismo pero no recuerdo lo que dice" 48.25
Dudas, dudas, dudas. 49.38
"Yo no tengo la sensación de que le salvé la vida. Más bien tengo la sensación de que le abandoné porque huí para salvar mi propia vida." 54.50






Trond Agnar (21 años). Dirigente de la AUF
"No dejaré que me dispare a mí ni a la gente con quien estoy" 34.45






Lara Rashid y su hermana Bano. Ambas imágenes son del documental.
A la izquierda Lara, la superviviente, relatando su testimonio.
A la derecha Bano, una de las víctimas mortales, riéndose ante la cámara que grababa el documental "campamento en Utowa", el día previo a la masacre.


Line Oma. Empleada del Ministerio de Trabajo noruego. Salía de trabajar cuando estalló la bomba de Oslo. Sus dos compañeras de trabajo más próximas fallecieron.
"Hace mucho tiempo que yo deseo llegar algún día a ser primera ministra" 15.40
"Pero en lo único que podía pensar era en la visión abrumadora de los edificios gubernamentales bombardeados y en que era la mayor tragedia que había sufrido nunca Noruega".

El documental es estremecedor. No soy aficionado al género pero salta a la vista que el suceso reune muchos de los tópicos del cine de terror: campamento juvenil, noche de lluvia intensa, psicópata caracterizado (en este caso de policía. Un toque siniestro digno del mejor guionista. La víctima primero se tranquiliza al ver llegar a un "agente del orden" para en seguida darse cuenta del tremendo error), una isla sin escapatoria...

Pero hay un elemento discordante en la opresiva sensación de tragedia y horror. Me resultan llamativos e inverosímiles algunos testimonios de los supervivientes. Demasiado recurso al lugar común ("el país perdería su inocencia si se trataba de una bomba", referido a las primeras noticas que llegaban desde Oslo), demasiado discurso autoconsciente (¿no es inverosimil que una persona que acaba de sufrir un terrible atentado "solo pueda pensar en que era la mayor tragedia que había sufrido nunca Noruega"? ¿no tiene familia esa mujer?), demasiada explicación e interpretación y poca narración de los meros hechos.

Al poco caí en la cuenta de que los testimonios que me parecían "manipulados" eran los de los dirigentes de la AUF y la aspirante a primera ministra. El resto de testimonios, es decir, los de los campistas de "a pie" sí me resultaban creíbles y estremecedores. Eskil Pedersen, Emma Martinovic y en menor medida Trond Agnar no dudan, parecen tener siempre una visión global de lo que está sucediendo,  mantienen la cabeza fría y toman la decisión más adecuada en cada momento. Por algo son líderes. Ahí está la anécdota de Emma Martinovic a punto de dejarse llevar, exhausta de tanto nadar, pero reaccionando cuando ve a un niño que necesita consuelo.

Pero cuando las decisiones pueden ser discutibles o incluso injustamente criticables, entonces nuestros líderes nos explican que en realidad no son decisiones suyas sino que se vieron obligados a actuar así por las circunstancias. Eskil Pedersen era el líder de la AUF y por tanto el máximo responsable del campamento. Tiene 27 años, diez más que la mayoría de sus compañeros. Cuando el asesino pisa la isla y comienzan los disparos, Eskil sube corriendo al barco y "leva anclas". Pero él no toma ninguna decisión. Así lo cuenta:
"La otra persona que había en la habitación me llamó y me dijo: vete corriendo al barco ya". Es decir, parece que la "orden" de huida partió de otra persona, no salió de motu propio.
"Pasé corriendo al lado de dos personas que estaban tendidas en el suelo. Estaban muertas. No tuve la menor duda de que estaban muertas". Cuánta seguridad. En cualquier caso mejor que estuvieran muertas, de esta forma Eskil se evita verse en la disyuntiva de intentar ayudarlas. Las circunstancias.
"Yo fui la última persona en subir al barco. No había nadie más allí. No volví a ver a nadie. No había nadie allí". Otra vez rotúndamente seguro. No había nadie allí. No había necesidad de esperar por si alguien más alcanzaba el barco puesto que no había a quien esperar. Nuevamente las circunstancias se ponen de su parte.
"Muy deprisa el barco empezó a alejarse". Había nueve personas en el barco. Él sin duda era la persona de mayor rango y el máximo responsable. ¿Qué ocurrió en el barco? ¿Qué pensaron? ¿Qué se dijeron unos a otros?. Silencio (Sabemos, gracias al testimonio de Johannes Dalen, que intentaron contactar con distintos miembros del gobierno e incluso llegaron a hablar con varios Secretarios de Estado. Lo que no sabemos es si estas llamadas se produjeron cuando el barco estaba todavía atracado en la isla -lo dudo- o ya después de abandonarla). Al parecer nadie tomó ninguna decisión. El barco, autónomamente, dirigido por nadie, empezó a alejarse muy deprisa. Eskil tuvo mucha suerte de que el barco no empezara a alejarse muy deprisa antes de que él pudiera embarcar. Caramba con el barco.

Que quede claro: no estoy criticando el comportamiento que tuvo Eskil Pedersen ese día, ni siquiera creo que mienta (me parecería mezquino afirmar que miente sin ninguna prueba). Doy por hecho que los muertos estaban muertos y que no había nadie más que pudiera subir al barco. Lo que me irrita es su actitud: su seguridad sin fisuras, la falta de cuestionamiento, su responsabilidad (siempre pensando en Noruega y en la seguridad de todos) irresponsable (al parecer no es responsable de ninguna decisión. En toda la crisis nunca parece decidir nada, siempre se mueve obligado por las circunstancias), esa obsesión con aparentar dominar la situación incluso en el caos más absoluto ("No dejaré que me dispare a mí ni a la gente con quien estoy", afirma Trond Agnar, otro de los dirigentes de la AUF)..

Los campistas de "a pie", los que en principio no son responsables más que de sí mismos, los que no tienen permanentemente a Noruega en la cabeza, sí tomaron decisiones: correr o no correr; huir nadando o esconderse; ayudar a un herido o no; quedarse con un amigo o no; constestar al móvil o desconectarlo para no hacer ruido; fiarse o no fiarse de ese policía con un comportamiento extraño... De hecho no dejaron de tomar decisiones en todo el rato. Y por eso sienten remordimientos. Se cuestionan que hubiera ocurrido si hubieran tomado otra decisión. Intentan comprender por qué actuaron tal y como lo hicieron ("Entonces desaparece todo pensamiento racional y actuas por puro instinto" comenta Herman Heggertveit).

Johannes Dalen, Woria Kamil, Herman Heggertveit relatan lo ocurrido a la manera de David Copperfield. Se sienten los protagonistas, los héroes, de su propia historia. Nada más y nada menos. En cambio los dirigentes políticos y la aspirante a primera ministra, Eskil Pedersen, Emma Martinovic, Trond Agnar y Line Oma relatan lo ocurrido como si ellos fueran los protagonistas, los héroes de la historia, mejor aún, de la Historia de Noruega.

Supongo que en eso consiste ser un dirigente político: sentirse protagonista, seguridad sin fisuras en el discurso, apariencia de cotrol de la situación, tener la respuesta adecuada y sin ninguna duda a cada reto por díficil e incontrolable que este sea (por ejemplo un psicópata armado suelto en una isla). Nunca ponerse en cuestión a uno mismo. Madera de político.